Un día normal en el Líbano.
Ya os hemos comentado en varias ocasiones el ritmo libanés y lo desorga-
nizados que pueden llegar a ser. Hoy, después de un día libre, tranquilo y que nuestro cuerpo agradeció mucho, hemos llegado al trabajo a las 10:30 h. Nos hemos puesto a trabajar y teníamos una reserva a las 12:30. A la 13:00h viene el jefe de compras y nos dice tenemos que ir urgente a renovar vuestro visado (ya habíamos advertido hace una semana a todo el mundo que nos caducaba el día 22), pues bien dejamos el restaurante y nos vamos a la dirección general de seguridad. Allí tenías que ver: es como los funcionarios de la administración en España, pero a lo bestia. Menos mal que íbamos acompañados por un libanés. Después de estar 45 min. de puesto en puesto, de capitán en capitán. Por fin llegamos a la cola. Nos piden 2 fotos de cada uno y la fotocopia del pasaporte. Por supuesto, no llevábamos esta documentación. Así que nos dirigimos a un estudio fotográfico. Cuando entramos, el hombre estaba comiendo tan ricamente encima del mostrador, buen provecho, le decimos y cuando termina de comer, entonces se dispone a hacerlos las fotos. Nos hace subir una escalerita donde el hombre tenía sus cosetas para hacernos las fotos. Primero se sienta Josevi y el hombrecete, profesionalmente le coge las manetas y se las pone encima de las rodilletas. Le hace ponerse un poco de perfil, pero sólo un poco, le alza la barbilla y le pone el hombro en el sitio ( yo claro, no podía evitar, mientras tanto partirme el culo) y el hombre no paraba de decir: llevo 50 años haciendo fotos y tenía razón, hemos salido muy bien, pero yo no podía evitarlo porque era todo tan surrealista). Después me ha tocado a mí y claro me partía el culo…
Bueno, nos disponemos a volver a la Seguridad General: nos vuelve a hacer todo el proceso: 5 mostradores, móviles en el guardarropa….
Rellenamos toda la documentación y nos hemos quedado flipaos, cuando nos dicen que se quedan nuestros pasaportes y que volvamos en una semana a por ellos: Madre mío, ahora somos unos indocumentados, pero nos han dicho que eso es normal…
Volvemos al restaurante cagando leches, porque teníamos una reserva que cuando hemos llegado ya había comido, porque yo tenía una cita con un cliente que quería hacer un evento… Pues bien, llegamos al restaurante y nos ponemos a trabajar… Cuando nos disponemos a marcharnos por tarde, nos dicen que vienen a traer todos los aparatuzos que Josevi les pidió para poder hacer cocinitas( ya llevan un mes para traerlos), pero es que al estar haciendo obras en la terraza del restaurante( solo ponerle techo de uralita a un trocete de la terraza) pues no podían meter los aparatuzos de Josevi…Josevi salía de la cocina partiéndose el culo por no llorar... i dient: che jo de major obrer en el Líbano( che, sempre tranquilet, fumant, bambant, menos treballar… Així de fort ens va dir en 2 díes això ho tens acabat i ja portem un mes….) C’est le ritme libanese!!!!
Con todo esto, el jefe pesao, llamando a ver si lo podían poner o no…
Bueno nos hemos reído un mazo, porque pa que estresarse…..
No es lo mismo verlo que contarlo, pero es que como nos hemos reído tanto tenía ganas de compartirlo. Bueno, espero que a partir del año que viene vayáis viniendo todos para comprobarlo… Esto es mejor que un spa Consue: aquí nunca te preocupas, nunca te estresas… Clarament: don’t worry, be happy. I lo peor es que ya le vamos cogiendo el tranquillo….
Un besazo.